Contacto en Taliouine

Saliendo de Tafraoute pasamos una noche en Taliouine,  una aglomeración con unos 6000 fieles y probablemente más de un infiel, conocida por el cultivo del azafrán.

Fuimos a Dar Azaafaran, la exposición de las  cooperativas locales. Tiene dos salas, la primera es un pequeño museo y  la segunda sirve de tienda y recepción, donde pasan un corto video explicativo sobre la cultura del azafrán. Nos brindaron el  té de cortesía, amarillo y  amargo. Fue una visita rápida, el sitio estaba full  con un  grupo de jóvenes  scouts ingleses. Las dependientas estaban apuradas, nos invitaron a regresar al día siguiente, cerraban más temprano (horarios del ramadán).

Nuestra guía de viaje (Lonely Planet) sugiere visitar el atelier del cosmopolita artista Moulid Nidouissadan .  

Moulid nos recibe sonriente y  se toma el tiempo para  explicarnos con mucha pasión y  humor su arte, honrar la humanidad preservando  la cultura Amazigh mediante su alfabeto Tifinagh.

Los Amazigh fueron los habitantes originarios del norte de África, a quienes llamamos,  hoy en día, bereberes (originario del latin, barbarus para indicar que no son romanos). Los bereberes o amazigh se definen como hombres libres e incluyen grupos étnicos tales como los Tuareg de Mali, los Kabilios de Argelia o los Guanches canarios. 

Bueno, Moulid nos explicó un montón de cosas interesantes, incluyendo los fonemas, muchos impronunciables para mí.  Él es uno de los máximos exponentes de la caligrafía Tifinagh, con delicados y enérgicos trazos crea logos y objetos originales muy apreciados en diferentes latitudes.

Antes de marcharnos insiste en regalarnos un souvenir,  nos muestra una fotocopia de una página del Le Guide du routard y nos dice: — Si si, miren aquí está escrito, tengo que regalarles un marcapáginas —así escogimos dos de sus logos (Michel, Viajar en Marruecos y yo, Viaje), luego escribió nuestros nombres en tinta de azafrán y los selló con una pistola termica.

Nos despedimos alegres y agradecidos por este insólito encuentro. Partimos a la búsqueda de un restaurante para cenar  alguna especialidad  azafranada.  Misión imposible.  Si pasan por acá durante el mes del ayuno, reserven con tiempo.

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